Logitech fabrica algunos de mis teclados favoritos y el G Pro X TKL (o “tenkeyless”, lo que significa que carece de teclado numérico) se encuentra entre los mejores teclados para juegos. Tiene teclas retroiluminadas por LED RGB vibrantes y una opción de interruptores lineales, táctiles o de clic, y utiliza el adaptador inalámbrico Lightspeed de Logitech para un tiempo de respuesta competitivo a nivel de juego. Me encanta que el adaptador te permite emparejar varios dispositivos con un único dispositivo USB de bajo perfil, por lo que no necesitas usar todos los puertos para tus diversos accesorios.
La calidad de construcción de este teclado es elegante y elegante. Es mínimo y no ocupa mucho espacio en su escritorio, y tiene un sutil borde metálico alrededor del borde que le da un toque del que carecen la mayoría de los teclados simples. La rueda de volumen en la esquina superior derecha es suave y de fácil acceso, y en la parte superior hay prácticos controles multimedia para que puedas pausar tu música cuando finalmente ingresas a un juego después de una larga cola. Para mi gusto, cuanto más clic-clack sea un teclado, mejor, y los interruptores Black Clicky me han resultado muy útiles. Cada vez que presionas una tecla siento como si estuviera enviando un pequeño trueno a mi juego. Sin embargo, si prefieres algo más suave, puedes elegir otro tipo de interruptor. Lo único que no me gusta es la falta de un teclado numérico; sí, soy uno de esos bichos raros que prefiere tener un teclado numérico. Pero para la mayoría de la gente, este es el teclado a batir.
★ Alternativa: El Logitech Pro X60 por $180 (8/10, se recomienda WIRED) tiene prácticamente todos los beneficios del Pro X TKL en un paquete más pequeño y compacto. Mantiene la rueda de volumen, el interruptor de modo de juego y los botones Bluetooth/Lightspeed moviéndolos hacia los bordes del teclado, mientras adelgaza todo hasta un diseño del 60 por ciento.